Tipos de impresoras: cuál comprar según mis necesidades

Una impresora es un artículo de suma necesidad en cualquier hogar. Es muy tedioso acudir a un negocio de impresiones o depender de otras personas para tener los documentos impresos en el momento justo en que se los necesita. Existen muchos tipos de impresoras según la necesidad de cada cliente. 
 
Entender qué impresora es mejor, es directamente proporcional a preguntarse la intensidad de uso que se le va a dar, o qué calidad se espera de los resultados. Entre todos los tipos de impresoras que hay en el mercado, son muchas las variables a analizar. Al tratarse de una compra de precios un poco más elevados que otras, te sugerimos asesorarte leyendo esta nota para saber mucho más.

¿Qué es una impresora?

Una impresora es un accesorio complementario o periférico de una computadora, que cuando adquiere conectividad puede imprimir sobre papel u otros elementos (sustratos), los textos, imágenes, gráficos o cualquier producción hecha en una aplicación.
 
Se las conoce también como “hijas de las máquinas de escribir”, ya que este artículo ha sido en cierta forma pionero de esta posibilidad para el hombre (y actualmente se la considera una antigüedad en desuso, aunque muchos escritores tradicionales deciden seguir usándolas).
 
La interfaz de usuario tuvo mucho que ver en la evolución de los tipos de impresora que hoy existen, y eso se debe también a los cambios que fueron arrojando los sistemas operativos informáticos. 

Características de una impresora y todos los tipos

Las mayor cantidad de impresoras que se venden y son pedidas por los clientes, son las multifunción. Estos modelos tienen la característica de poder imprimir, fotocopiar, escanear o capturar imágenes, incorporando tecnologías que no necesitan estar vinculadas a una computadora de escritorio. 
 
Hay algunas variables muy interesantes sobre las cuales estar atento: la escala cromática que incluye, el tipo de conectividad con el que cuenta (si se la puede vincular a otros equipos sin necesidad de extender cables o conectores), la cantidad de páginas por minuto que puede imprimir y el tipo de tecnología que aplica para hacerlo. 
 
Las impresoras de “chorro de tintas” son también de las más vendidas, pero eso se debe a su bajo costo y la facilidad con que se puede operar en ellas. La forma de imprimir es a través de cartuchos de tinta (cuyos colores pueden ser amarillo, magenta, cian y negro, los conocidos pigmentos utilizados en impresión “offset”). La calidad no es tan elevada como con otros tipos de impresoras, pero es muy habitual encontrar estos modelos en comercios, hogares, oficinas y otros ámbitos. 
 
Otro de los tipos de impresoras más comunes y de las que habrás escuchado hablar, es el de impresoras láser. La calidad que se obtiene de estos modelos es sin dudas la mejor posible. Algunas imprentas deciden optar por estos artículos para comercializar sus impresiones. 
 
Ni bien se lanzaron al mercado, al tratarse de una tecnología innovadora, tenían costos muy elevados para los usuarios comunes que buscaban llevar una a su hogar. En la actualidad, eso se ha revertido y se pueden encontrar muchos tipos de impresoras láser a costos razonables para cualquier cliente. 
 
Otra ventaja indiscutida de las impresoras láser, es la gran velocidad en la que puede sacar grandes tandas de impresión. A comparación de otros tipos de impresora, estos modelos tienen además ese beneficio diferencial y único por el que muchos dueños de negocios deciden comprarla. 
Entonces, en resumen, estos tipos de impresoras son los más actuales y consumidos por los usuarios regulares hoy en día. Vale destacar que también existen otras clasificaciones de productos como los plotters, que son máquinas pensadas para gigantografías o impresiones profesionales. 
Es muy común encontrar alguno de ellos en un estudio de diseño gráfico o sala profesional de impresión, pero muy poco habitual ver a un cliente regular comprando uno para tener en su hogar y utilizar de forma cotidiana. 

¿Por qué tener una impresora en casa?

Muchas personas se preguntan si se justifica o no la inversión de tener una impresora en casa. Lo cierto es que, aunque ya se va muriendo la entrega de documentaciones en papel y todo tiende hacia una burocracia virtual en donde se cuida más al planeta y se ahorran más costos, todavía existen muchas ocasiones e instituciones que requieren de documentaciones físicas. 
 
Son muchos los contextos en los que es cómodo y práctico tener una impresora en casa: para hacer fotocopias, llevar documentaciones escaneadas para exhibir en aeropuertos y ciudades, imprimir apuntes de estudio, restaurar fotografías en programas de edición y contar con ellas para tenerlas en portarretratos, etc. 
 
Por lo tanto, es esencial disfrutar de los días de descuento y buscar un modelo multifunción, en lo posible láser, a un valor inigualable. Estas oportunidades no se dan muy seguido y las impresoras son productos que tienen un alto valor de venta durante todo el año, independientemente de la marca que las comercialice.